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Confesiones de una compradora compulsiva
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Confesiones de una compradora compulsiva

Confessions of a Shopaholic
  • Público apropiado: Todos-jóvenes
  • Valoración moral: Adecuada
  • Año: 2009
  • Dirección: P.J. Hogan
Contenidos ---

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Reseña

Dirección: P.J. Hogan
Intérpretes: Isla Fisher, Hugh Dancy, Krysten Ritter, Joan Cusack, John Goodman, Kristin Scott Thomas, John Lithgow.
Argumento: Sophie Kinsella (Novelas "Confessions of a Shopaholic" y "Shopaholic Takes Manhattan")
Guión: Tracey Jackson, Tim Firth, Kayla Alpert
Música: James Newton Howard
Fotografía: Jo Willems
Distribuye en Cine: Walt Disney
Duración: 104 min.
Género: Comedia, Romántico

Concuspicencia de la tarjeta 

    En el mundo glamuroso de la ciudad de Nueva York, Rebecca Bloomwood (Isla Fisher) es una chica divertida y muy buena haciendo compras, demasiado buena quizás. Sueña con trabajar en su revista de moda favorita, pero no encuentra el modo de meter la cabeza hasta que, irónicamente, consigue un trabajo como columnista en una revista económica publicada por la misma compañía. 

    Con su sueño a punto de cumplirse, Rebecca tiene que hacer los esfuerzos más increíbles para impedir que su pasado arruine su futuro.

    Érase una mujer a una tárjeta de crédito pegada, érase una compradora compulsiva... Esto podríamos decir, parafraseando a Quevedo, de Rebecca Bloomwood, una joven periodista, despierta y agradable, pero que no puede resistir la tentación de comprar todo tipo de trapitos y calzado 'ad hoc'. Hasta tal punto que sus múltiples tarjetas empiezan a estar agotadas, y un especialista en impagados la acecha con tesón. 

    Simpática comedia que se basa en las populares novelas de Sophie Kinsella, que en su retrato de los apuros de una mujer de nuestros días conecta con otros éxitos recientes filmados a partir de libros, como El diablo viste de Prada y El diario de Bridget Jones.
 
    El australiano P.J. Hogan, que despertó muchas esperanzas con sus comedias iniciales La boda de Muriel y La boda de mi mejor amigo, pero cuya carrera luego se ha ido desinflando, retoma el tono del segundo film citado, con un ritmo ágil, repleto de gags ocurrentes, y traslada a Nueva York la acción londinense del original. 

    La película se ve con una sonrisa todo el tiempo, pues se juegan con inteligencia las cartas de la historia amorosa, la relación de las dos amigas, el suspense del cobrador, la adicción a las compras y las reuniones de personas que quieren dejar tal vicio... Isla Fisher y Hugh Dancy son dos actores jóvenes en alza, que aguantan bien la película, y cuentan con el respaldo de secundarios solventes, algunos -Krysten Ritter, Kristin Scott-Thomas, Robert Stanton- mejor aprovechados que otros -John Goodman, Joan Cusack, John Lightow-. 

    Si se quiere, el film intenta ser una crítica al consumismo exacerbado, pero tampoco debería ser tomado demasiado en serio en tal aspecto, pues pesa mucho más su condición de divertimento, y lo cierto es que al verlo dan unas ganas locas de irse a comprar algo. En la puesta en escena hay alguna idea ingeniosa, como la de la animación de los maniquíes que invitan a comprar las prendas que lucen. 

    Hogan ha sabido resistirse al humor grueso y a las imposiciones de la ideología de género, de modo que su película mantiene una cierta elegancia. Comedia divertida con final feliz.(Decine21 / Almudí JJS-MM)