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El ilusionista, de Jacques Tati
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El ilusionista, de Jacques Tati

L'illusionniste
  • Público apropiado: Jóvenes
  • Valoración moral: Adecuada
  • Año: 2012
  • Dirección: Sylvain Chomet

Contenidos: ---

Reseña:

Año de producción: 2010
País: Francia, Reino Unido
Dirección: Sylvain Chomet
Guión: Sylvain Chomet, Jacques Tati
Música: Sylvain Chomet
Distribuye en Cine: Sherlock
Duración: 88 min.
Género: Animación

El genio redivivo
Chomet anima un guión de Tati con gran sensibilidad y un amor evidente por la obra del genio.

   “El ilusionista (L’Illusionniste)” narra las aventuras de un viejo mago que, al comienzo de la década de los 60, viaja acompañado de su inseparable conejo haciendo espectáculos de magia por toda Europa, en un mundo seducido por el rock y la TV en el que la inocencia, la ilusión y la imaginación ya no tienen cabida. Tras partir desde París y pasar por Londres, el ilusionista llega a un pueblecito de Escocia, donde conoce a Alice, una joven que aún posee la ingenuidad y asombro características de la infancia. Ella todavía ignora que le quiere como a un padre; él siente que la ama como a su hija. Durante su convivencia nacerán momentos tiernos y mágicos que les marcarán para siempre…

   Preciosa y tiernísima película dirigida con una impresionante maestría por Sylvain Chomet, quien en 2003 ya llamó la atención con Bienvenidos a Belleville. En este caso toma un guión original e inédito de 1956, escrito por el genio francés del cine cómico, Jacques Tati (1907-1982), y lo traslada a dibujos animados con resultados próximos a la obra maestra. No hay un solo personaje desagradable y las aventuras del protagonista y su pequeña amiga son de tal ternura, amor y sencillez que acaban siendo tumbativas hasta para el más escéptico.

   La historia indaga en el fin de una época, la de la ilusión y la imaginación, un mundo pretérito donde los sueños podían hacerse realidad. El modo en que se muestra esa terrible conclusión es puro cine, pero también sorprende por su triste crudeza y su punto pesimista (y tan realista al fin y al cabo). De cualquier forma, el conjunto resulta memorable por la gran carga poética en numerosísimas secuencias e imágenes de gran belleza, con animación tradicional a base de dibujos sencillos y alargados que recuerdan un poco el estilo de Toulouse-Lautrec. La música es muy adecuada y nostálgica. Con todo merecimiento la película obtuvo la nominación al Oscar (Decine21 / Almudí JD). LEER MÁS