Almudi.org
  • Inicio
  • Libros
  • Películas
    • Estrenos de CINE
    • Estrenos de DVD - Streaming
    • Series de TV
  • Recursos
    • Oración y predicación
    • La voz del Papa
    • Infantil
    • Documentos y libros
    • Opus Dei
    • Virtudes
    • Kid's Corner
  • Liturgia
    • Misal Romano
    • Liturgia Horarum
    • Otros Misales Romanos
    • Liturgia de las Horas
    • Calendario Liturgico
    • Homilías de Santa Marta
  • Noticias
  • Almudi
    • Quiénes somos
    • Enlaces
    • Voluntariado
    • Diálogos de Teología
    • Biblioteca Almudí
  • Contacto
    • Consultas
    • Colabora
    • Suscripciones
    • Contactar
  • Buscador
  • Noticias
  • ‘Imploremos a Dios el don de la reconciliación y de la unidad’

‘Imploremos a Dios el don de la reconciliación y de la unidad’

  • Imprimir
  • PDF
Escrito por Francisco
Publicado: 31 Marzo 2017

El Papa recibe a los participantes del Congreso Internacional de Estudio sobre el tema: “Lutero 500 años después”

En la mañana de hoy, viernes 31 de marzo, el Santo Padre Francisco ha recibido en audiencia a los participantes en el Congreso Internacional de Estudios organizado por el Comité Pontificio de Ciencias Históricas, con motivo del  V Centenario de la Reforma luterana (1517-2017) sobre el tema: ‘Lutero 500 años después. Una relectura de la Reforma luterana en su contexto histórico eclesial’ que ha tenido lugar en Roma del 29 al 31 de marzo de 2017.

Publicamos a continuación el saludo que el Papa ha dirigido a los participantes en el curso de la audiencia.

Discurso del Santo Padre

Queridos Hermanos, Gentiles Señoras y Señores, os recibo con gusto y os saludo cordialmente. Agradezco al Padre Bernard Ardura sus palabras, con las que ha resumido el sentido de este Congreso sobre Lutero y su reforma.

Os confieso que el primer sentimiento que tengo ante esta loable iniciativa del Pontificio Comité de Ciencias Históricas es un sentimiento de agradecimiento a Dios, acompañada también por un cierto asombro, al pensar que no hace mucho tiempo un congreso de este género habría sido del todo impensable. Hablar de Lutero, católicos y protestantes juntos, por iniciativa de un organismo de la Santa Sede: verdaderamente tocamos los frutos de la acción del Espíritu Santo, que supera toda barrera y transforma los conflictos en ocasión de crecer en la comunión. Del conflicto a la comunión es precisamente el título del documento de la Comisión Luterano–Católica Romana para la conmemoración común del quinto centenario del inicio de la Reforma de Lutero.

Me alegra saber que esta conmemoración ha ofrecido a estudiosos procedentes de varias instituciones la oportunidad de mirar juntos esos eventos. Profundizaciones serias sobre la figura de Lutero y su crítica a la Iglesia de su tiempo y al papado contribuyen ciertamente a superar aquel clima de mutua desconfianza y rivalidad que por demasiado tiempo en el pasado caracterizó las relaciones entre católicos y protestantes. El estudio atento y riguroso, libre de prejuicios y polémicas ideológicas, permite a las Iglesias, hoy en diálogo, discernir y asumir lo positivo y legítimo de la Reforma, y tomar distancia de errores, exageraciones y fracasos, reconociendo los pecados que llevaron a la división.

Todos somos bien conscientes de que el pasado no puede cambiarse. Sin embargo, hoy, después de cincuenta años de diálogo ecuménico entre católicos y protestantes, es posible hacer una purificación de la memoria, que no consiste en realizar una imposible corrección de lo sucedido hace quinientos años, sino en «contar esa historia de modo diverso» (Comisión Luterano–Católica Romana por la unidad, Del conflicto a la comunión, 17-VI-2013, 16), ya sin restos de aquel rencor por las heridas padecidas que deforma la visión que tenemos los unos de los otros. Hoy, como cristianos, todos estamos llamados a liberarnos de los prejuicios a la fe que los otros profesan con un acento y un lenguaje distinto, a intercambiarnos mutuamente el perdón por las culpas cometidas por nuestros padres e invocar juntos de Dios el don de la reconciliación y de la unidad.

Mientras acompaño con la oración vuestro valioso trabajo de investigación histórica, invoco sobre todos nosotros la bendición de Dios omnipotente y misericordioso. Y os pido, por favor, que recéis por mí. Que Dios nos bendiga a todos. Gracias.

Fuente: vatican.va / romereports.com.

Traducción de Luis Montoya.

  • Anterior
  • Siguiente

Colabora con Almudi

Quiero ayudar
ARTÍCULOS
  • Eficacia de la Sagrada Escritura en la configuración de la vida cristiana
    Bernardo Estrada
  • Aprender a amar: amor y libertad
    Teresa Cid
  • Cristo hombre perfecto. Naturaleza y gracia en la Persona Divina de Cristo
    Ignacio Andereggen
  • Revolución de la ternura: un nuevo paradigma eclesial en el pontificado de Francisco
    Amparo Alvarado Palacios
  • La confesión sacramental, un camino de libertad y de amor a Dios
    Redaccion opusdei.org
  • El hombre como relación a Dios según Kierkegaard
    Juan F. Sellés
  • El juicio final en la teología de santo Tomás de Aquino
    Leo Elders
  • La «cooperación orgánica» del sacerdocio común y del sacerdocio ministerial en las Prelaturas personales
    José R. Villar
  • Eucaristía y sacerdocio
    Fernando Ocáriz
  • La Pedagogía del Amor y la Ternura: Una Práctica Humana del Docente de Educación Primaria
    César Enrique López Arrillaga
  • Mons. Álvaro del Portillo y el Concilio Vaticano
    Card. Julián Herranz
  • Una nueva primavera para la Iglesia
    Benedictus.XVI
  • El mensaje y legado social de san Josemaría a 50 años de su paso por América
    Mariano Fazio
  • El pecado: Negación consciente, libre y responsable al o(O)tro una interpretación desde la filosofía de Byung-Chul Han
    Juan Pablo Espinosa Arce
  • El culto a la Virgen, santa María
    Gaspar Calvo Moralejo
MÁS ARTÍCULOS

Copyright © Almudí 2014
Asociación Almudí, Pza. Mariano Benlliure 5, entresuelo, 46002, Valencia. España

  • Aviso legal
  • Política de privacidad